La forma más común de instalar una distribución GNU/Linux, es a través de un archivo en formato ISO (extensión .iso), descargándolo desde el sitio web oficial de su distribución.
Para una instalación desde USB (pendrive o similar) consultar artículo Instalar Linux desde USB, para crear un dispositivo USB bootable (arrancable).
La instalación desde CD/DVD es la forma más fácil y habitual (usualmente las distribuciones Linux de hoy en día ya no caben en un CD). Para grabar la imagen ISO en un CD o DVD, utilizar un grabador de discos deseado, como Xfburn o K3b para Linux o bien CDBurnerXP para Windows. Actualmente la mayoría de sistemas operativos incorporan de forma predeterminada un grabador que permite grabar imágenes ISO.
El siguiente paso es arrancar el ordenador (ya sea PC o portátil) desde el disco CD, o memoria USB. Para ello, existen múltiples formas, dependiendo del tipo, marca, modelo de equipo, … En ocasiones, el arranque desde CD o USB es automático, no necesitándose ningún paso más.
Tabla de contenidos
El método tradicional es pulsar una tecla o combinación de teclas, en el momento justo en el que el ordenador arranca, antes de darle tiempo a que el sistema operativo instalado arranque.
En PCs torre o sobremesa es habitual que la tecla que da acceso al menú BIOS sea Supr, mientras que en portátiles puede ser cualquier tecla en el ranto de F1 a F12, e incluso una combinación, como Fn + F2.
Una vez en el menú BIOS (es el menú de la placa base), debemos buscar la forma, entre las opciones, de indicar que deseamos que el primer dispositivo en arrancar sea el CD-DVD, o bien el USB (dependiendo desde donde estamos instalando). Salir guardando los cambios realizados, y el menú de la distribución se abrirá.
Menú de opciones de Ubuntu
Los pasos descritos son para la instalación de la distribución Ubuntu, aunque muchos de estos pasos son iguales o similares para muchas distribuciones.
El Live CD de Ubuntu nos permite probar el sistema Ubuntu, haciéndolo ejecutarse igual que si se tratase de un sistema instalado, pero sin realizar ningún cambio en nuestro equipo. Podemos así, verificar cierta compatibilidad con tarjeta gráfica, ver si el sistema nos gusta, etc.
Continuando con la instalación, seleccionar ‘Instalar Ubuntu’ > seleccionar el idioma y la región.
Si el tipo de conexión a Internet del equipo es vía wifi, accedemos a nuestra red wifi e introducimos contraseña. No es absolutamente necesario, pero ahorrará tiempo en futuras actualizaciones.
Seleccionar Instalación normal y marcar la casilla de verificación ‘Descargar actualizaciones al instalar Ubuntu’. Consideramos recomendable marcar la casilla de verificación ‘Instalar programas de terceros para hardware de gráficos y de wifi…’.
Particiones de disco
Se nos ofrece varias posibilidades
- Borrar disco e instalar Ubuntu. La instalación es automática, sin preocuparnos de particionar el disco de almacenamiento, y Ubuntu utiliza una sola partición para datos y sistema, y otra para Swap. Esta opción borrará todo el contenido del disco.
- Instalación junto al SO existente, sea cual sea.
- Algo más: Podemos con esta opción, particionar el disco adecuadamente, creando una partición para el sistema, una para los datos, etc.
Al entrar en la ventana de particionado, los diferentes dispositivos de almacenamiento (HD o SSD) que existan se usualmente se mostrarán como /dev/sda, /dev/sdb, /dev/sdc, … Las particiones ya hechas dentro de estos discos se mostrarán como /dev/sda1, /dev/sda2, …
Eliminamos las particiones deseadas con el botón -. Agregamos nuevas particiones con el botón +.
Existe controversia entorno al particionado del disco al instalar un GNU/Linux. No obstante las particiones recomendadas para la instalación de Ubuntu son:
- Partición para el sistema operativo. Punto de montaje: /. Sistema de ficheros recomendado: ext4. Tamaño: Consultar tamaño recomendado en el sitio web oficial de cada distribución GNU/Linux. Para Ubuntu, 10GB es un tamaño correcto.
- Área de intercambio (swap). Tamaño: Acostumbraba a ser el doble de la memoria RAM instalada.
- Partición para los datos. Punto de montaje: /home. Sistema de ficheros recomendado: ext4. Tamaño: el resto del espacio disponible en el disco.
- Partición fat32 o de espacio libre. Puede opcionalmente crearse una partición para la compatibilidad con sistemas Windows, archivos de arranque, ejecutar varios sistemas operativos, …
Eventualmente, podemos obtener el mensaje de error que nos indica que nuestra tabla de particiones necesita una partición de al menos 35MB marcada como «EFI boot partition» (partición del sistema EFI). En este caso, debemos retroceder y crear esta partición.
Para la instalación de Ubuntu, el particionado recomendado en su documentación oficial.
Para el resto de la instalación, seguir los pasos, bastante obvios, del asistente.
Distribuciones Linux para ordenadores viejos
Existen distribuciones Linux capaces de correr en verdaderas «tartanas»: equipos con Procesadores Pentium II o Celeron, y RAM del orden de 256MB (son solo ejemplos, consultar requerimientos para cada caso). También hay opciones para correr Linux en la Raspberry Pi.
- Puppy Linux. Configuración minimalista, distro ligerísima, gracias entre otros al gestor de ventanas JWM (Joe’s Window Manager), y al explorador de archivos ROX-Filer. Guía de uso e instalación.
- Lubuntu. Es una versión ligera de Ubuntu. Utilizar el sistema de escritorio minimalista LXDE/LXQT. Rápido y ligero, con una interfaz limpia y fácil de usar.
Distribuciones Linux para Raspberry Pi
- Raspberry Pi OS, anteriormente llamado Raspbian, es la distribución oficial de Raspberry Pi. Está basada en Debian. Una de las opciones de instalación del SO, consiste en descargarse el «Raspberry Pi Imager» en un equipo (Linux, Windows o cacOS) con un lector de tarjetas SD.
- Ubuntu Core. La versión más pequeña de Ubuntu, hace posible que podamos instalar un Ubuntu en la Raspberry Pi.
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